Impala 59
En 1959, todas las divisiones de General Motors rediseñaron sus carros, en parte como reacción a las dramáticas aletas que desde 1957 ofrecían los vehículos de la “Chrysler Corporation” y en parte, para que todas sus divisiones pudiesen compartir las partes básicas de las plataformas y carrocerías entre ellas; así, el Impala, por ejemplo, tenía partes compatibles con los vehículos Oldsmobile y Pontiac y también con los de la gama baja de Buick, siendo esto parte de una estrategia económica de la General Motors.Este nuevo Chevrolet tenía una distancia entre ejes de 28.45 cms, más larga que en el modelo anterior. La nueva carrocería montada sobre un chasis tipo “X”, era 7.62 cms. más baja y algo más de 5 cms. más ancha. El incremento del tamaño, el cual era una tendencia de la época, contribuyó a que el peso bruto del vehículo también aumentara. Las aletas traseras, que eran otra tendencia de la época, sobresalían hacia afuera y en vez de tener los tres “stops” en línea, los diseñadores optaron por acomodar en medio un solo y alargado “stop”, en forma de ojo de gato o lágrima, con 5 divisiones simuladas por 4 biseles.
Impala era ahora una serie independiente y dejó de ser una sub-serie del Bel-Air. Siendo independiente, esta incluía: un sedán de 4 puertas, un sedán de dos puertas, un sedán sport, un sport coupé, un convertible coupé, una carriola 4 puertas y una carriola de 2 puertas. Los Impala Sport Coupé venían con un techo más corto y un parabrisas trasero envolvente, el cual ofrecía una visión ilimitada desde el espejo retrovisor. El Sport Sedan, que también tenía una enorme ventana trasera, no traía parales laterales entre las dos puertas y el techo era tipo “ala volante”.
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